Inteligencia artificial y reinvención de los modelos de negocio

En la última década, la inteligencia artificial ha dejado de ser un recurso experimental para convertirse en el eje estratégico de transformación empresarial. Su papel ya no se limita a la automatización de tareas, sino que se proyecta como un habilitador de nuevas lógicas comerciales.

La integración de sistemas inteligentes permite a las empresas rediseñar su modelo de negocio desde la raíz: no solo en términos operativos, sino también en cómo se generan ingresos, se construyen relaciones con los clientes y se ofrecen servicios personalizados. Oluwatoyin Farayola, investigadora de la University of Txas in Dallas, señala de acuerdo con investigaciones recientes que la IA está reconfigurando todos los bloques del modelo Canvas (modelos visuales de negocio con diseño modular), especialmente en pequeñas y medianas empresas que deben adaptarse rápidamente a entornos de incertidumbre. Esta transición, sin embargo, exige no solo inversión tecnológica, sino una comprensión profunda de las implicaciones estratégicas que conlleva.

Startups y ecosistemas emergentes centrados en IA

Uno de los campos donde esta reconfiguración se ha acelerado es en el de las empresas emergentes que basan su modelo de negocio en tecnologías digitales (startups digitales), en especial aquellas cuyo núcleo operativo es la IA. En el artículo “Business innovation in digital startups” publicado en marzo de 2025 por el International Review of Economics & Finance se analiza cómo estas empresas diseñan desde el inicio sus procesos internos y externos con tecnologías inteligentes, lo cual les permite replicarlos en sus estrategias, canalizar decisiones de mercado mediante sistemas predictivos y ajustar sus ofertas con base en simulaciones virtuales generadas por modelos lingüísticos avanzados. Este fenómeno, que se ha observado particularmente en ecosistemas emprendedores de Asia, implica un cambio de paradigma: la IA no solo apoya el negocio, sino que es el negocio. No obstante, esta ventaja competitiva está condicionada por factores como la regulación, la disponibilidad de talento y la calidad de los datos.

Industrias tradicionales y aplicación práctica de la IA

Los sectores tradicionales también están incorporando inteligencia artificial con efectos notables en productividad y seguridad. En la industria de la construcción, por ejemplo, se han implementado algoritmos para prever accidentes en obra, analizar condiciones ambientales y optimizar la distribución de recursos, como ocurre con la firma Shawmut en Estados Unidos. Business Insider (2025), destaca cómo Shawmut Design and Construction, empresa que cuenta con 30 000 trabajadores, utiliza IA para monitorear seguridad en sitios de obra, predecir incidentes con datos climáticos y comportamiento del personal. Este uso elevó no solo la seguridad sino también la eficiencia operativa.

Esta tendencia no se restringe al sector primario: en el automotriz, compañías como Tesla emplean IA para el monitoreo remoto de sistemas, la gestión de datos del vehículo y la mejora continua de la experiencia del usuario. Estos avances demuestran que la IA no es solo para empresas digitales, sino también una herramienta transformadora para industrias con décadas de antigüedad.

Personalización, marketing y analítica inteligente

El marketing es otro terreno fértil para la expansión inteligente. Gracias a la IA, las marcas han alcanzado un nivel de personalización que habría sido impensable hace solo unos años. Empresas minoristas como Target han logrado anticiparse a comportamientos de consumo mediante modelos predictivos, generando campañas publicitarias con altos rendimientos. A la vez, plataformas analíticas como Aladdin, utilizadas en el sector financiero, han reformulado la manera en que se gestionan riesgos y se toman decisiones de inversión. Estas herramientas no solo ofrecen análisis en tiempo real, sino que también permiten la toma de decisiones autónomas en contextos de alta complejidad. El marketing con IA, por tanto, no solo optimiza recursos: crea nuevas formas de relacionarse con los usuarios.

Gobernanza, talento y ética en el despliegue de la IA

Sin embargo, el verdadero valor estratégico de la IA no se limita a su aplicación técnica, sino a su integración dentro de la cultura y la estructura organizacional. De acuerdo con el artículo Artificial intelligence: how leading companies define use cases, scale-up utilization, and realize value publicado por Informatik Spektrum (2023), las empresas que logran desplegar iniciativas de IA exitosas son aquellas que desarrollan mecanismos de gobernanza adecuados, que invierten en talento capacitado y que alinean su visión tecnológica con los objetivos globales de la organización. Este enfoque holístico también implica un compromiso ético: implementar auditorías de algoritmos, prevenir sesgos automatizados y respetar la privacidad de los usuarios. Tal como se evidencia en sectores como la biotecnología y la farmacéutica, el despliegue ético y estratégico de la IA requiere superar resistencias culturales profundas.

IA y los negocios del futuro

La inteligencia artificial ha pasado de ser una promesa tecnológica digna de los seriales de ciencia ficción a consolidarse como una palanca estructural en múltiples ámbitos del mundo de los negocios. Desde la configuración inicial de startups (análogas o digitales) hasta la transformación de sectores industriales consolidados, la IA está remodelando la forma en que las organizaciones piensan, producen y compiten. Pero este cambio no es meramente técnico: exige nuevas capacidades humanas, una gobernanza adaptativa y un enfoque ético riguroso. Las organizaciones que comprendan este doble desafío tanto tecnológico como cultural serán las que definan el rumbo de los negocios en los próximos años.

La Unidad de Inteligencia e Interpretación (SIU) de Celestial Dynamics transforma datos en estrategias accionables mediante análisis avanzado, estudios de mercado y evaluación de tendencias en IA y HPC. Su misión es proporcionar insights clave para la toma de decisiones en negocios, políticas públicas y transformación digital, optimizando el impacto de la tecnología en múltiples sectores.